Add parallel Print Page Options

40 Cada año les daré de mis propios tesoros ciento sesenta y cinco kilos de plata, que se tomarán de donde sea más conveniente. 41 Además, les daré todo lo que ha sobrado de las contribuciones de los funcionarios, lo cual dejaron de pagarme en años anteriores, y así tendrán dinero para los trabajos del templo.

42 »Como ustedes saben, del dinero que se recoge en el templo tenían que pagarme cincuenta y cinco kilos de plata cada año. Pues bien, de ahora en adelante ya no tendrán que pagar dicho impuesto. Ese dinero se les entregará a los sacerdotes que trabajan en el templo.

Read full chapter